¿Trump quiere escalar la guerra comercial? Europa ya se prepara
Europa se está armando para un mundo comercial más desprovisto de leyes, y la mirada del bloque está ya sobre Estados Unidos.
El jefe de comercio de la Unión Europea, Phil Hogan, buscaba ayer una actualización de la legislación de la Unión Europea (UE) sobre la aplicación de las normas comerciales internacionales. Su propuesta permitiría a la UE imponer sanciones contra países que restringen ilegalmente el comercio y simultáneamente bloquean el proceso de solución de disputas de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
La iniciativa en Bruselas no es una coincidencia. Este miércoles, el muy apreciado organismo de apelaciones de la OMC se volvió incapaz de manejar nuevos casos porque un veto de EU en un nombramiento al panel lo dejó sin el mínimo de tres miembros requeridos para los veredictos.
El organismo es la autoridad suprema de la organización, que emite decisiones vinculantes que otorgan a las partes ganadoras en disputa el derecho de aplicar sanciones comerciales, como aranceles más altos contra países que infringen la ley. Desde antes de la administración Trump, EU acusó al panel de apelaciones de sobrepasar su mandato y exigió cambios en sus prácticas.
La UE se prepara para evitar que la agenda y el proteccionismo del presidente Donald Trump socaven el orden global basado en las normas con las que Europa está comprometida.
En los últimos tres años, Trump enfureció al bloque al golpear su acero y aluminio con aranceles basados en controvertidos motivos de seguridad nacional, colgó la amenaza de gravámenes similares sobre automóviles extranjeros y elaboró planes para atacar productos franceses con gravámenes en represalia por un impuesto digital aplicado en ese país.
El presidente de EU también ha tratado de restringir el comercio europeo con Irán, después de retirarse de un acuerdo internacional para controlar las actividades nucleares de ese país y se echó para atrás del acuerdo histórico de Naciones Unidas para combatir el cambio climático.
Los aranceles de EU al acero y al aluminio, introducidos en 2018, llevaron a la UE a quejarse ante la OMC. El bloque también se apresuró a establecer sus propias defensas comerciales para el acero y evitar que los gravámenes estadounidenses desvíen los envíos globales al mercado europeo y lo inunden.
La legislación modificada de Europa que Hogan está presentando llega menos de dos semanas después de que asumió el cargo como parte de un nuevo equipo de liderazgo en la Comisión Europea, el brazo ejecutivo del bloque, bajo la presidencia de Ursula von der Leyen. La propuesta, que requiere el apoyo de los gobiernos de la UE y el Parlamento Europeo en un proceso que durará el próximo año, tiene impulso político. En una reunión programada del 12 al 13 de diciembre en la capital belga, los líderes nacionales del bloque piden a sus legislativos “que examinen, como cuestión prioritaria, la propuesta de la comisión”, según un borrador de declaración de la cumbre visto por Bloomberg.
Los jefes de gobierno también deben expresar su apoyo a un sistema de arbitraje provisional que la comisión está buscando con socios comerciales de la UE como Canadá y China, a la espera de cualquier reactivación del organismo de apelación de la OMC.
Jacques Pelkmans, experto en comercio e investigador principal del grupo de expertos CEPS en Bruselas, mencionó que la UE probablemente sea prudente sobre el despliegue de cualquier herramienta nueva de sanciones en su arsenal político. “Cuando se trata de socios, el enfoque, sin duda, se basará en la primacía de la consulta y la presión de grupo”, dijo. “En el extremo, la UE podría querer tener la opción de usarlo”.
Fuente: Hoy