CEPAL indica que altos costos de producción ponen en desventaja al sector lácteo dominicano
La cadena de valor de los lácteos en la República Dominicana enfrenta una serie de desafíos que es necesario resolver en el corto y mediano plazo para satisfacer la demanda nacional, potenciar la incorporación de las micro, pequeñas y medianas empresas, y mejorar la calidad de la producción nacional.
Así lo establece un estudio de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), en el cual participaron los Ministerios de la Presidencia y de Industria y Comercio, el FIDA y el Consejo Nacional para la Reglamentación Lechera (Conaleche).
Dicha investigación destaca que la baja producción de leche, por vaca, con una media de 3.02 litros y los altos costos colocan a este sector en una posición altamente desventajosa ante productos equivalentes importados de otros países.
El informe indica que si se conseguieran estos tres objetivos, se podrá generar un escalamiento económico y social de la cadena en términos de empleo y de creación de negocios para los principales actores.
Según estimaciones de la Dirección General de Ganadería (Digega) y del Conaleche, la producción ganadera nacional involucra a unos 58,000 productores que se encargan de la crianza y reproducción del ganado, y de éstos, alrededor de 17,000 se dedican exclusivamente a la producción de leche.
El estudio sostiene que de acuerdo con Conaleche, la producción nacional de este alimento es de 1.6 millones de litros diarios y el 54.1% de la producción es utilizada en la fabricación artesanal de quesos, entre el 16% y el 20% se destina a la producción industrial de las grandes procesadoras, el 19.9% se utiliza para el autoconsumo, el 5.5% para el consumo fresco, y el 4.4% en las fábricas de yogurt y dulces.
Ante este escenario, la CEPAL propone cinco programas para atender las restricciones de la cadena de manera integral.
El programa 1 se refiere a la gobernanza o administración de la cadena, que busca crear un sistema de estadísticas actualizadas del sector agropecuario para una mejor identificación de actores estratégicos, para la coordinación intra e intereslabones y para la creación y seguimiento de políticas públicas basadas en evidencia.
El programa 1 también persigue el fortalecimiento de las capacidades del sector público en materia de control, verificación e inspección del cumplimiento de las normas mínimas de seguridad en fincas, centros de acopio, plantas de procesamiento, transporte y puntos de venta, así como el fortalecimiento de las capacidades de las organizaciones de productores y procesadores a lo largo de la cadena.
En tanto que el programa 2 busca promover y apoyar a la ganadería lechera sustentable y competitiva a partir de un plan técnico para el buen uso de los recursos naturales, el manejo de praderas y forrajes, la disminución de los costos de producción al nivel de finca y el desarrollo y la comercialización de insumos locales para la industria ganadera, todo ello bajo un enfoque ecoeficiente que promueva la utilización planificada de insumos, mejore la rentabilidad y reduzca los impactos sobre el medio ambiente.
El programa 3 es para la protección de la calidad de la leche y derivados a partir de la formulación y ejecución de un programa de bioseguridad.
El estudio indica que es importante sensibilizar a los actores de los eslabones sobre la importancia de conservar la calidad e inocuidad del producto a lo largo de la cadena, con especial atención a los productores pequeños y medianos, transformadores artesanales y transportistas (intermediarios).
El programa 4 fomenta al valor agregado de la leche con un programa de acompañamiento apoyado por los Centros Pymes.
Por último, el programa 5 persigue la promoción del consumo de leche y derivados con énfasis en los productos nacionales. Presta particular atención a promocionar los beneficios nutricionales del consumo de leche en las diferentes etapas de la vida del ser humano.
Los procesadores grandes y medianos consumen menos del 25% de la leche producida en el país, en la mayoría de los casos se trata de leche grado A, a lo sumo grado B, por lo que su demanda de insumos es insatisfecha. Esta leche es procesada principalmente por las cuatro empresas más grandes del país.
Por: Almílcar Nivar
Fuente: Diario Libre